La vida nos pone siempre frente a elecciones, y si no las realizamos de forma consciente, al final es la vida la que elige por nosotros, llevándonos donde no quisiéramos. Pero con el discernimiento, leyendo un pedacito de la Biblia cada día recibes “pequeños telegramas de Dios que te llegan de inmediato al corazón”.
Reflexión del Santo Padre: